Redacción: Joel Charles
Los datos fiscales del Tesoro de los Estados Unidos han revelado un incremento alarmante en la deuda pública total del país, que alcanzó los 32.659 billones el 27 de julio, representando un aumento de 392.75 mil millones en comparación con el mes anterior.
Dicho crecimiento ha llevado a que los pagos de intereses trimestrales de América sobre su deuda se acerquen a la sorprendente cifra de 1 billón de dólares, según el Banco de la Reserva Federal de St. Louis.
El Instituto Cato ha alertado sobre la preocupante situación, argumentando que la creciente deuda del país se ha convertido en un problema de seguridad nacional.
En una publicación de blog, Romina Boccia y Dominik Lett expresaron que el retraso en aplicar reformas fiscales responsables frente a la creciente deuda federal puede llevar a un declive económico y nacional. Destacaron que una alta y creciente deuda federal de Estados Unidos puede llevar a una supresión de la inversión privada, una disminución de los ingresos y un mayor riesgo de una crisis fiscal repentina.
Los autores resaltaron que la reforma de los programas de prestaciones, como el Seguro Social, Medicare, Medicaid y otros programas basados en necesidades, es esencial, dado que actualmente representan la mitad del presupuesto federal. Al mismo tiempo, el gasto en defensa constituye una quinta parte del presupuesto.
En este contexto, Boccia y Lett enfatizaron que la defensa nacional es una responsabilidad central del gobierno federal, y que una crisis fiscal significativa podría erosionar la base económica y la fortaleza de América, limitando su capacidad para defender sus intereses vitales tanto en el país como en el extranjero.
Para abordar la creciente deuda, los autores instaron a los legisladores de EE.UU. a establecer una comisión de deuda que se ocupe de la reforma de las prestaciones. Propusieron que las recomendaciones de dicha comisión se conviertan automáticamente en ley con la aprobación del presidente.
Según Boccia y Lett, una comisión bien diseñada, compuesta por un grupo diverso de expertos y guiada por objetivos claros establecidos por el Congreso, podría ofrecer soluciones efectivas para reducir la deuda y proteger la economía y la seguridad de Estados Unidos.
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