La anual convención nacional bancaria tendrá que incluir al Banco de Bienestar. Será parte del grupo de banqueros, es una realidad, y tendrá varias sucursales. En las bases de licitación del Banco de Bienestar se advierte que la empresa ganadora deberá mantener los costos pactados en el contrato una vez vayan abriendo las sucursales, y que se harán estudios de factibilidad del acceso de las unidades blindadas, pues algunas están en zonas alejadas. La empresa ganadora ¿qué tipo de vehículos tendrá? ¿Usará animales, como caballos, burros o mulas para hacer los traslados de dinero?, porque la violencia está en toda la República Mexicana. Por otro lado, recordamos las graves inundaciones en Tabasco, mitad naturales y mitad provocadas por una orden presidencial desinformada, y pensamos que deberán considerar los impactos del cambio climático, por lo cual deberán tener lanchas, ya que las carreteras o caminos, son deficientes en todo y los puentes se vuelven de papel. ¿Se invertirá tanto dinero en el Banco de Bienestar, dejando al sector salud sin medicamentos y a la educación sin las herramientas tecnológicas que requiere para modernizar la enseñanza en las zonas marginadas. No sé cómo van a funcionar estos bancos y los banqueros estarán en una silla de primera fila viendo una película destinada al fracaso. Los servicios de los bancos son muy extensos. Mencionó algunos: dotación y concentración de efectivo, fondos de corto plazo, ensobretado de efectivo, envases sellados para monedas y billetes, transporte aéreo de valores, personal de mantenimiento para los cajeros automáticos e infraestructura digital para que funcionen. Y vigilancia, contratar mucha vigilancia para que los cajeros no sean saqueados por el crimen organizado o por los mismos habitantes, éstos a punta de machetazos. Después del intermedio de la película, la empresa ganadora deberá dedicar al menos 20 unidades blindadas diarias para trasladar 75 mil millones de pesos en 60 mil envases preparados, en 50 mil viajes que recorrerán 2.5 millones de kilómetros. Perdón, creo que el título de la película debe ser “Misión Imposible”. Dicen que además tienen que surtir a los cajeros automáticos de 4 mil millones de pesos en 3 mil 500 visitas, aunque todavía no se sabe qué empresa proveerá los ATM, con un presupuesto de 425 millones de pesos, IVA incluido por supuesto. Pero, además, sabrá Dios cuándo los entregarán, porque se producen sobre pedido… y no son enchiladas. El servicio iniciará este 2021 con 433 sucursales, 95 oficinas sin atención al público y 11 módulos en instalaciones del Instituto Nacional de Migración. ¿Podría alguien explicarme para qué 95 oficinas sin atención al público? Lo que más necesitan los adultos mayores es, justo, que los atiendan presencialmente, porque en las zonas marginadas muchos carecen de teléfonos inteligentes. ¿Cómo los contactaran? De verdad, “Misión Imposible”. A la mejor me equivoco y toda esa infraestructura es para otros fines. Quizá en lugar de escritorios habrá lavaderos, porque es ahí donde las mujeres se enteran de todo y comprenden mejor las cosas. Después del anuncio presidencial de volver a como estábamos cuando se mudó a Palacio Nacional, es decir a bajar la edad para que la pensión se entregue desde los 65 años y no los 68 que dispuso, porque estamos en año electoral, habrá que sacrificar recursos de otros programas y aumentar el riesgo fiscal del país. La pensión aumentará gradualmente hasta llegar a 6 mil pesos bimestrales en 2024. Tal vez por eso la Secretaría de Hacienda anda como sabueso tras los contribuyentes y hasta haciendo algo de terrorismo fiscal para allegarse recursos. Se les olvida que 2020 fue un año de pandemia, que mucha gente quedó sin empleo y miles de empresas cerraron, todos ellos causantes cautivos -o sea, los que pagamos-. Pero eso no importa al secretario de Hacienda ni al gobierno federal, Ellos quieren que los medianos, pequeños y microempresarios paguen, así como los trabajadores y profesionistas. El presidente necesita dinero para regalarlo, para asegurar los votos el 6 de junio, y para pagar todos sus caprichos, como sus trenecito del sureste y su refinería sumergible. En su púlpito de Palacio Nacional -ha de pensar que es una especie de lámpara de Aladino-, suelta sus ideas para gastar el dinero en proyectos como el de las sucursales del Banco de Bienestar. ¿Acaso no la Sedesol de la administración pasada había avanzado en la digitalización de los pagos para evitar precisamente gastos en sucursales y cajeros automáticos, además de burocracia? ¡Ah, pero ese es tema de los conservadores… y ya sabemos que no son iguales! ¿Qué motivación puedes tener como pequeño empresario si -como vampiro- el SAT te saca hasta la última gota de liquidez, aunque te haya pedido no cerrar ni disminuir empleos, pero sin darte ningún estímulo? Cuando no es tuyo, tiras a diestra y siniestra el dinero, en proyectos que dejarán a los ciudadanos sin ganas de apostar por México. Por eso los migrantes quieren llegar a Estados Unidos, aunque en México les den visas, credenciales del INE y hasta apoyos sociales. ¿Cómo verán las cosas que se arriesgan a seguirle hasta llegar al norte? Los migrantes saben que aquí jamás estarán como en los Estados Unidos, con los “gringos”, como se refieren los migrantes a los ciudadanos vecinos del norte.
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