Redacción: Amairany Ramírez
El reloj marca la cuenta regresiva para las elecciones presidenciales este próximo 2 de junio, los candidatos a los principales partidos políticos han puesto en marcha el último tramo de sus campañas electorales con un enfoque renovado y estratégico.
Desde los inicios del proceso electoral, los aspirantes han desplegado extensas propuestas, discursos y estrategias, cada uno buscando atrapar la atención y el apoyo de los votantes; no obstante, con el inicio del último tramo, la competencia se intensifica y agudiza con la búsqueda de conexiones profundas con el electorado.
Haciendo un recuento Claudia Sheinbaum recorrió 29 entidades, Baja California Sur, Tlaxcala y Nayarit son estados con la menor cantidad de votantes los cuales faltan por visitar; desde el inicio de la etapa electoral, explicó que su campaña sería primordialmente en territorio, la candidata lleva 29.793 km recorridos.
A su vez, Xóchitl Gálvez candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, tiene cuatro estados pendientes para finalizar su primera vuelta al país. Durante estos días recorrió 28 identidades concentrando sus asambleas en Estado de México, Nuevo León, Puebla, Jalisco y Veracruz, estados donde hay mayor cantidad de votantes, la candidata lleva 37,665 km recorridos.
Jorge Álvarez Máynez, candidato presidencial de Movimiento Ciudadano pisa el acelerador en este segundo mes de campaña, con 16 entidades recorridas, 30 universidades, con 22,262 km recorridos hasta la fecha. Es el primer candidato presidencial en pisar el barrio de Tepito.
La importancia de este último tramo no puede ser subestimada. Cada palabra, gesto y acción de los candidatos serán examinados por los votantes, quienes evalúan quien encarna mejor sus valores, preocupaciones y aspiraciones para el futuro del país. La batalla por la presidencia entra en su fase culminante, y cada movimiento puede marcar la diferencia entre la victoria y la derrota.
El reloj avanza implacablemente, y los candidatos a la presidencia están listos para enfrentar el desafío con determinación, convicción y el firme compromiso de servir a la voluntad del pueblo. La contienda entra en su fase definitiva, y el destino de la nación está en manos de los ciudadanos que, con su voto, decidirán quién será el mejor líder del país para un futuro mejor.