El fiscal especial encargado de la investigación del asalto al Capitolio, Jack Smith, presentó una nueva acta de acusación contra el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Esta reformulación se produce en respuesta a un fallo reciente de la Corte Suprema que establece ciertos límites a la inmunidad presidencial. La nueva acusación reduce algunas de las alegaciones originales y se ajusta al dictamen del máximo tribunal, que concede inmunidad absoluta para acciones dentro de la autoridad constitucional del presidente, pero no para actos no oficiales.
La nueva acta de acusación, presentada ante un gran jurado en Washington D.C., mantiene los cuatro cargos principales contra Trump, incluido el de conspiración para obstruir un procedimiento oficial. Sin embargo, se han eliminado algunas alegaciones relacionadas con los esfuerzos del expresidente para que el Departamento de Justicia apoyara sus afirmaciones infundadas de fraude electoral en las elecciones de 2020.
La acusación original, que constaba de 45 páginas, ha sido reducida a 36, eliminando menciones a ciertos individuos y eventos que ahora se consideran protegidos bajo la inmunidad presidencial. Entre los cambios más notables está la exclusión de un conspirador, que anteriormente había sido identificado como Jeffrey Clark, exfuncionario del Departamento de Justicia.
La reformulación del caso llega en un momento clave, justo antes de que tanto la fiscalía como los abogados de Trump presenten sus propuestas al juez encargado del caso sobre cómo debería evaluarse el impacto del fallo de la Corte Suprema. Trump, por su parte, ha calificado la nueva acusación como un «acto de desesperación» por parte del fiscal Jack Smith, a quien ha criticado duramente en su red social Truth Social.
El caso continúa generando un intenso debate en Estados Unidos, con implicaciones que podrían extenderse a las próximas elecciones presidenciales, en las que Trump es nuevamente candidato. Además, el expresidente ha anunciado que participará en un debate con la vicepresidenta Kamala Harris el 10 de septiembre, lo que subraya la relevancia política del proceso judicial en curso.
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