El panorama político en Guerrero ha sido sacudido nuevamente con la renuncia del Vicefiscal de Investigación, Gabriel Hernández Mendoza, apenas cinco días después de asumir el cargo. Esta renuncia, anunciada la noche del 19 de marzo, se produce en medio de una serie de movimientos en la Fiscalía estatal tras la destitución de la Fiscal Sandra Luz Valdovinos el pasado 13 de marzo.
Hernández Mendoza, quien había sido designado como el sucesor de Valdovinos, justificó su renuncia citando la no cumplimentación de la edad mínima requerida para ocupar el puesto según lo estipulado por la Constitución de Guerrero, que exige al titular de la Fiscalía tener al menos 30 años de edad.
En un comunicado oficial dirigido a la Gobernadora Evelyn Salgado, Hernández Mendoza afirmó haber servido de manera objetiva, honrada, transparente y profesional durante su breve mandato, pero señaló que presentaba su renuncia irrevocable debido a la mencionada discrepancia en la edad mínima exigida por la ley estatal.
Según lo establecido por la legislación local, la responsabilidad de suplir la vacante de Hernández Mendoza recae ahora en el Vicefiscal de Prevención y Seguimiento, Gustavo Romero, quien se espera que asuma la dirección de la Fiscalía hasta que se realice una nueva designación.
La destitución de la Fiscal Sandra Luz Valdovinos, anunciada anteriormente, fue atribuida a su presunto incumplimiento en las evaluaciones de control de confianza, así como a su supuesta negligencia en la investigación de hechos de violencia de alto impacto. La Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, acusó a Valdovinos de inacción en el caso del asesinato del normalista Yanqui Khotan Gómez Peralta por parte de un policía, lo que, según el comunicado, habría puesto en riesgo la paz en el estado. Además, se reveló que Valdovinos no había cumplido con las evaluaciones de control y confianza desde agosto de 2019, según lo detallado en un documento leído durante una sesión en el Congreso estatal.
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