Redactor Fernando Galindo
La inflación en el territorio mexicano continúa desacelerándose y se ubica en su menor nivel desde marzo de 2021, acercándose cada vez más a la meta planteada por Banxico, de acuerdo con los datos divulgados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En la primera quincena de junio el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) aumentó apenas 0.02% respecto a la quincena previa, con lo que la tasa anual se ubicó en un nivel de 5.18%.
Con ese resultado, la inflación hiló tres quincenas a la baja, y se ubicó en su menor nivel desde marzo del 2021, cuando los precios al consumidor aumentaron en 4.12%.
La meta del Banco de México (Banxico) es que la inflación se ubique en 3% +/- un punto porcentual, por lo que cada vez el indicador general se acerca más a este objetivo.
“El índice de precios subyacente registró un aumento de 0.11 % a tasa quincenal y de 6.91 % a tasa anual. En el mismo periodo, el índice de precios no subyacente cayó 0.26 % quincenal y creció 0.03 % a tasa anual”, se lee en el informe.
En cuanto a los productos que registraron mayor incremento de precios se encuentra: el chayote (22.14%), jitomate (5.53%), naranja (3.97%), azúcar (2.60%). Sin embargo, los productos y servicios que registraron una disminución en su precio son: el limón (8.58%), el huevo (7.19%), otros chiles frescos (3.47%) y gas doméstico LP (3.46%).
¿Qué es la inflación?
La inflación hace referencia al aumento de los precios de bienes y servicios en un periodo de tiempo, o lo que es lo mismo, la disminución del valor del dinero con respecto a la cantidad de bienes y servicios a comprar con él.
Esta puede deberse a varios factores, como los siguientes: la demanda que se genera es superior a la oferta, es decir, se requiere una cantidad de bienes superior a lo que se es capaz de producir, lo que hace que los precios suban. El aumento de los costes en la producción de un bien o servicio suben
También puede tener varios tipos, en base a los cuales es posible encontrar distintas clases:
Moderada: la subida de precios es gradual y, habitualmente, no supera el 10 % anual.
Galopante: la subida de los precios es muy elevada, en la mayoría de los casos de 2 o 3 dígitos (15 %, 30 %, 130 %, etc.) al año, lo que hace que se reduzca el poder adquisitivo de los potenciales consumidores, hecho que afecta directamente a la economía del país.
Hiperinflación: los precios ascienden de manera exagerada (por encima del 1.000 %). Esto hace que el dinero de un país pierda su valor dando lugar a una grave crisis económica.
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