El 21 de agosto de 2024 marcó un día histórico en México con el inicio de un paro nacional del Poder Judicial. La medida, encabezada por jueces y magistrados federales, se tomó en respuesta a la controvertida reforma al Poder Judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Este paro, que ha generado una gran atención mediática y preocupación en la sociedad, es visto por muchos como un acto de resistencia frente a lo que los trabajadores del sistema judicial consideran una amenaza directa a la independencia y derechos laborales en el sistema judicial mexicano.
La reforma a la justicia promovida por el gobierno de AMLO, ha sido criticada por sectores del Poder Judicial y la sociedad civil por percibirla como un intento de politizar y controlar las instituciones judiciales. Entre las principales preocupaciones, se encuentra la posibilidad de que la reforma socave la independencia judicial, un principio fundamental en cualquier democracia.
Juana Fuentes Velázquez, una destacada jueza que se ha convertido en una de las voces más visibles en esta protesta, declaró que la reforma podría desencadenar una "crisis constitucional" en México. En su discurso, subrayó que el paro no es una medida tomada a la ligera, sino una respuesta a una situación extrema que, según ella, podría dejar cicatrices profundas en el tejido social del país.
Casos excepcionales que continuarán recibiendo atención
A pesar de la magnitud del paro, el Poder Judicial ha establecido excepciones para garantizar que ciertos casos de carácter urgente no queden desatendidos. Estos incluyen:
●Centros de Justicia Penal Federal: continuarán evaluando detenciones, vinculaciones a proceso, y medidas cautelares relacionadas con prisión preventiva, entre otros.
● Juzgados de Distrito Especializados en Ejecución: se atenderán casos que impliquen peligro para la vida o integridad de las personas, así como decisiones sobre beneficios preliberacionales.
● Juzgados de Distrito: se mantendrán las actuaciones relacionadas con el peligro para la vida o integridad de las personas, la salud, y los derechos de personas migrantes, entre otros.
● Tribunales Laborales Federales: procedimientos relacionados con huelgas continuarán siendo procesados.
El paro del Poder Judicial representa un punto crítico en la relación entre el gobierno de AMLO y las instituciones judiciales de México. Este evento no solo pone de manifiesto la tensión entre el Ejecutivo y el Judicial, sino que también plantea preguntas sobre el futuro de la democracia y el estado de derecho en el país.
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