Redacción: Joel Charles

Según datos revelados por la agencia de investigación Kantar, 64% de los mexicanos está muy preocupado por la inflación, contra 68% que le atemoriza la violencia; mujeres y familias del Sur del país son los más agobiados por el alza de precios.
El aumento en la inflación es igual de preocupante que los estragos provocados por la inseguridad para los consumidores mexicanos, el estudio realizado por la agencia Kantar reporta que: el 68% de los mexicanos considera que la violencia y crimen son la preocupación más importante a nivel nacional; con tasas que se disparan a 72% y 76% en los hogares del Norte y Sur del país.
Pero, de forma paralela, 64% de la población advierte que el encarecimiento de productos y servicios es la segunda causa de preocupación más importante, por los efectos negativos que genera contra su economía y al bienestar de su familia.
Precisó que (en particular) las mujeres de todo el país y las familias que viven en los estados del Sur del territorio mexicano son los sectores que se sienten más agobiados por el alza de precios, con niveles de intranquilidad 69% y 73%, respectivamente.
“No es de extrañar, entonces, que entre las principales preocupaciones de los mexicanos se menciona a la inflación y a la violencia y el crimen”, seguidas de un 54% que piensa en el cambio climático.
“Más aún, seis de cada 10 consumidores creen que su situación económica es peor que la de hace un año y, cada vez más personas, prevén un porvenir complicado”, apuntó la consultora.
Ante esta situación la agencia reportó también un cambio en los hábitos de consumo, donde el 46% de las personas se han visto obligados a cambiar sus hábitos de compra, adquiriendo otro tipo de productos (más baratos) así como recortar sus gastos generales, mientras que otro 14% hizo uso de sus ahorros para sobrevivir a la inflación.
En este contexto, el estudio de Kantar arrojó que 39% de la población todavía “no ha tenido que hacer ningún recorte o cambio”; pero advierte que “tendrá que hacerlo”; y solo 15% se siente a salvo de la inflación y “no cree que tenga que hacer un cambio” en sus hábitos de compra.
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