Redactor: Joel Charles

Decenas de campesinos de varios municipios irrumpieron en el Congreso del Estado de Zacatecas el pasado lunes. Este incidente tuvo lugar justo al concluir un acto solemne en el que se develó la leyenda "Bicentenario del Heroico Colegio Militar" en letras doradas. Los agricultores y ganaderos tomaron esta medida para exigir a los distintos niveles de gobierno que emitan de inmediato una declaratoria de desastre debido a la sequía que está afectando gravemente al sector agropecuario de Zacatecas.
La manifestación comenzó con una concentración en un costado de la Plaza de Armas, frente al Palacio de Gobierno, en la Avenida Miguel Hidalgo. Desde allí, los campesinos marcharon por varias calles, haciendo oír sus demandas con gritos y pancartas, hasta llegar a la explanada del Poder Legislativo, ubicada en la calle Fernando Villalpando. Aunque en ese momento el salón de plenos estaba vacío, algunos cadetes del Heroico Colegio Militar todavía estaban presentes en las gradas, tras el acto protocolario.
Los campesinos expresaron su desesperación ante los medios de comunicación, destacando que "ya no se puede sembrar nada; lo que se sembró se ha perdido por completo. Nuestra única esperanza es que el gobierno nos apoye". Otros manifestantes exigieron la declaración de Zacatecas como zona de desastre agrícola y ganadero, afirmando que "no habrá cosechas y estamos vendiendo el ganado a precios bajos. El campo está en crisis, no hay futuro".
Posteriormente, una vez que el salón de plenos quedó vacío, los campesinos ingresaron al recinto y fueron escuchados por un par de diputados a quienes entregaron una petición formal de declaratoria de desastre debido a la sequía. La solicitud iba dirigida al gobernador David Monreal Ávila, y los manifestantes le pidieron su apoyo.
Fernando Galván, líder de productores rurales del municipio de Río Grande, leyó el documento ante los medios de comunicación. Explicó que la decisión de manifestarse se tomó el jueves 21 de septiembre, cuando los productores agropecuarios de varios municipios se reunieron para analizar los graves problemas causados por la sequía y su impacto en la economía de Zacatecas.
En su solicitud, los campesinos instan al gobernador David Monreal Ávila a tomar medidas inmediatas, incluyendo gestiones ante las autoridades federales, incluyendo al presidente Andrés Manuel López Obrador, para declarar a Zacatecas como Zona de Desastre. También solicitan un plan de emergencia que garantice financiamiento e insumos para la siembra del próximo año y la protección del ganado, así como ingresos para la población rural a través de un programa de empleo temporal.
Galván también destacó la preocupación de los productores zacatecanos por la difícil situación que enfrenta el sector agropecuario en el estado y solicitó la atención de los diputados locales, así como de los titulares de las dependencias estatales y federales relacionadas con la agricultura y la ganadería.
Según Galván, debido a la sequía prolongada en este ciclo agrícola primavera-verano, se sembraron solo 380,000 hectáreas de las 650,000 habituales. De estas 380,000 hectáreas, ya se han perdido 300,000, y las 80,000 restantes están bajo estrés hídrico, lo que podría resultar en pérdidas totales si no llueve pronto. Además, el sector ganadero también sufre debido a la sequía, con agostaderos devastados y una grave escasez de pasto y agua en los bordos de abrevadero.
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