Para garantizar una vida libre de violencia y una infancia y adolescencia digna a las niñas, niños y adolescentes, las senadoras Geovanna Bañuelos, Cora Pinedo Alonso, Martha Márquez y el senador Joel Padilla solicitaron a las dependencias de la Administración Pública Federal redoblar esfuerzos para salvaguardar y respetar sus derechos, sobre todo de aquellos que se encuentran en zonas con altos índices de incidencia delictiva, en riesgo de ser víctimas de violencia o se encuentra en riesgo su desarrollo.
Mediante un punto de acuerdo presentado a la Comisión Permanente, los legisladores del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT), también pidieron a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, así como a sus homólogas en las 32 entidades federativas, incrementar las medidas que disminuyan los delitos de homicidios, secuestros, reclutamiento y desapariciones de niñas, niños y adolescentes.
Asimismo, llamaron a la Fiscalía General de la República y sus homólogas en las 32 entidades federativas, dar celeridad a las carpetas de investigación relativas a delitos de homicidios, secuestros, reclutamiento y desapariciones de niñas, niños y adolescentes.
En el documento que fue inscrito en la Gaceta, los legisladores petistas enfatizaron que en los tiempos actuales, niñas, niños y adolescentes enfrentan una situación de violencia.
De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), México es el segundo país en el mundo donde se comenten el mayor número de agravios en contra de niñas, niños y adolescentes.
“México es un país en el que sector poblacional sigue enfrentando violaciones a sus derechos humanos, situación que aumenta cuando nuestras infancias y adolescencias nacen, viven y se desarrollan en un contexto donde la violencia y la impunidad es sistemática”, apuntó la senadora Geovanna Bañuelos.
La coordinadora del GPPT, señaló que en 2023 las niñas, niños y adolescentes vieron menoscabados sus derechos, pues fueron víctimas de asesinatos, secuestros, reclutamiento al crimen organizado, desapariciones y otras graves violaciones que atentaron contra sus derechos humanos.
Con información de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM), en 2023 dos mil 95 niñas, niños y adolescentes de 0 a 17 años fueron asesinados entre enero y noviembre, de esta cifra 490 fueron mujeres y 1,605 hombres.
Los estados con mayor cantidad de homicidios fueron Michoacán, Guanajuato y Jalisco.
En cuanto a las desapariciones, de acuerdo con REDIM, desde que tienen registros, 98 mil personas de 0 a 17 años han sido reportadas como desaparecidas, no localizadas o posteriormente localizadas. De estas, 17 mil continúan como desaparecidas o no localizadas y 81 mil personas que fueron localizadas, aunque el 1% corresponden a niñas, niños y adolescentes hallados sin vida.
En el tema del reclutamiento de menores de edad, la senadora Geovanna Bañuelos detallo que éste puede ser forzado o no forzado. El primero de ellos consiste en que la delincuencia organizada mediante formas de violencia física, psicológica, económica y/o conductas delictivas como el secuestro, la extorsión, la trata y tráfico de menores, amenazas, chantaje, intimidación y/o maltrato físico captan a las niñas, niños y adolescentes.
El segundo consiste en que ocurre sin violencia y se manifiesta mediante engaño, ofertas económicas o laborales, prometiéndoles protección y por la necesidad económica. “Ambas formas atentan contra la dignidad y desarrollo de niñas, niños y adolescentes”.
“No existe una cifra exacta, pero en el país, al menos 30 mil menores de edad integran las filas de la delincuencia organizada y estimaciones señalan que alrededor de 250 mil menores están en riesgo de ser reclutados por el narcotráfico”, enfatizó
“La importancia de proteger la vida de niños y adolescentes ante la violencia criminal y en específico, ante los homicidios es fundamental, ya que son los más vulnerables a la violencia. No olvidemos que son ellas y ellos los más propensos a ser víctimas de violencia, toda vez que no tienen la misma capacidad de defenderse que los adultos”, concluyó Geovanna Bañuelos.
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