El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha reconocido recientemente que el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) enfrenta riesgos significativos de desintegrarse si se vuelve pragmático y pierde sus principios fundacionales. En una entrevista con los moneros Fisgón, Rapé y Hernández, AMLO enfatizó la necesidad de mantener un equilibrio entre principios y eficacia para evitar que la lucha por el poder socave el movimiento.
Morena, fundado por AMLO, ha crecido exponencialmente desde su creación, convirtiéndose en el partido dominante en México. Este crecimiento ha traído consigo la tentación de adoptar un enfoque más pragmático, enfocado en mantener y expandir el poder a expensas de los principios que originalmente unieron a sus miembros.
AMLO ha advertido que el poder puede "obnubilar y atontar", llevando a personas inteligentes a actuar de manera imprudente y a los menos capacitados a perder el sentido de la realidad. Según él, la única manera de evitar que Morena se convierta en un partido más preocupado por el poder que por sus ideales es asegurarse de que quienes permanezcan en el movimiento impriman principios y valores constantemente.
Uno de los principales desafíos que enfrenta Morena es la lucha interna por el poder. AMLO señaló que si el pragmatismo se impone, el movimiento podría terminar desmoronándose. Este riesgo es particularmente alto en un partido que ha crecido rápidamente y que ahora controla una gran parte del aparato estatal.
El presidente también destacó que la tentación del poder es una fuerza poderosa que puede cambiar incluso a las personas más comprometidas. La historia está llena de ejemplos de individuos que, tras años de lucha por ideales nobles, cambian su comportamiento cuando alcanzan posiciones de poder. AMLO subrayó que mantener la integridad moral es crucial para cualquier líder que quiera transformar México.
Para evitar la descomposición del movimiento, AMLO hizo un llamado a los miembros de Morena para que continúen imprimiendo principios y valores en el partido. Esto no solo protegerá al movimiento de la desintegración, sino que también garantizará que el enfoque siga siendo el bienestar del país y no simplemente la lucha por el poder.
AMLO expresó su satisfacción con la elección de Claudia Sheinbaum como su sucesora, argumentando que una persona con autoridad moral es esencial para liderar el país. Según él, la autoridad moral se traduce en autoridad política, y sin ella, un líder no tiene nada. Esto subraya la importancia de la integridad y la honestidad en la política.
AMLO también abordó su relación con los medios de comunicación, afirmando que enfrentarlos era necesario para lograr una transformación profunda en México. Acusó a muchos medios de estar subordinados a intereses económicos y de usar su poder para presionar y chantajear. A pesar de las campañas de difamación en su contra, AMLO dijo que siempre estuvo dispuesto a pagar una "cuota de humillación" por el bien superior.
El presidente destacó la importancia de sus conferencias matutinas, conocidas como "mañaneras", como un espacio para la réplica y la comunicación directa con el público. Según él, este espacio ha sido fundamental para contrarrestar las campañas de difamación y mantener una comunicación abierta con los ciudadanos.
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