El expresidente de México, Ernesto Zedillo Ponce de León y el actual mandatario, Andrés Manuel López Obrador, han mantenido una serie de declaraciones en los recientes días, en el marco del regreso del priista a México para participar en un foro público.
Durante el foro que se realizó en la Hacienda Los Morales, Zedillo mencionó lo siguiente:
Le preocupa la “regresión democrática” que está pasando en el mundo.
México y América Latina han abierto espacios al populismo, cuyos gobiernos predican que buscan fomentar la democracia, pero en la práctica buscan erosionarla
“Para tener democracia necesitamos ciudadanos que crean en la democracia y no en cultos”
Le preocupa que se busquen resolver problemas con “buenos deseos”
Mencionó que cada vez que algún político no entiende algo, lo califica de neoliberal, destacó el diario El País
Aseguró que no se considera neoliberal, desde niño se declaró "liberal, decimonónico, clásico y tradicional”
Considera que los gobiernos populistas buscan que los otros Poderes, Legislativo y Judicial sean "sumisos", al integrarlos por personas que se apeguen “a lo que quiere y desea el soberano” y no a lo que dicta la Constitución Política.
POSTURA DEL PRESIDENTE LÓPEZ OBRADOR ANTE LA VISITA DE ZEDILLO A MÉXICO
El presidente López Obrador respondió al expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León, luego de que participara este miércoles en un foro organizado por la firma Actinver.
López Obrador calificó las diferencias entre ambos como normales en una democracia, pero destacó que la gestión como titular del Poder Ejecutivo de Zedillo fue la de un gobierno faccioso, oligárquico con fachada de democracia.
El mandatario afirmó que el expresidente tiene derecho a expresarse y defender sus ideas, aunque destacó que Zedillo es partidario de neoliberalismo, mientras que él (López Obrador) no lo es.
López Obrador criticó que Zedillo, durante su mandato, aseguró que recibió apoyo de la iniciativa privada porque durante su mandato entregó bienes nacionales y, dijo, rescató a estos sectores durante una crisis, considerándolo un representante de la oligarquía.
Destacó que su postura difiere de la de Zedillo al señalar que durante el sexenio 1994-2000 no hubo democracia. Afirmó que la verdadera democracia implica la diversidad de pensamientos y aseguró que en su gobierno no busca imponer un pensamiento único.
Las declaraciones de López Obrador se suman a otras críticas que Zedillo ha hecho al gobierno del actual mandatario en los últimos años. En marzo de 2022, calificó como un "desastre" la gestión de la pandemia por parte de los gobiernos "populistas e ineptos" de América Latina.
En noviembre de 2023, el expresidente Zedillo expuso que le gustaría que el próximo presidente de México no fuera electo diciendo mentiras a los ciudadanos, que culpe a otros por sus propios errores y que haga promesas que no puede cumplir.